A pesar de la progresiva secularización de la sociedad española y de que todos los datos indican que cada vez menos alumnado asisten a clase de religión, en el inicio del curso escolar 2007-2008, la asociación estatal Europa Laica está recibiendo decenas de denuncias y preguntas, por parte de padres y madres de alumnos de infantil y primaria, por el incumplimiento sistemático de sus derechos constitucionales en muchos centros educativos del Estado español, sin que las Administraciones Públicas lo impidan. Las denuncias se refieren a:
- A miles de padres y madres que no desean que sus hijos reciban enseñanza de religión, con frecuencia los centros educativos les conminan a que cambien de opinión, con amenazas, coacciones y chantajes apoyados en argumentos como “tu hijo va a estar discriminado si no va a religión”, “no tenemos profesorado para atenderle”, “mejor en religión que en el pasillo”, etc. Ante ello, muchos ceden por temor a sufrir algún tipo de represalia o trato discriminatorio hacia sus hijos e hijas.
- A las familias se les sigue preguntando, en un documento público, al inicio de curso, sobre sus creencias y convicciones éticas y/o religiosas, hecho que es rotundamente ilegal.
- Algunos docentes aprovechan el ámbito escolar, para hacer proselitismo religioso católico de forma muy activa. Los obispados envían circulares y propaganda invitando a los fieles católicos a difundir campañas y actos en los centros educativos; estos docentes colocan esta propaganda de forma muy visible (en tablones de anuncios, aulas, etc.) y la reparten a los miembros del claustro de profesores y a las familias.
- Hay aulas donde todavía permanecen crucifijos y otros símbolos religiosos, propios de las décadas de la dictadura, cuando existía una religión oficial, obligatoria para todo el alumnado.
- En la casi totalidad de los centros privados concertados católicos, a los que asiste el 30% del alumnado, no está permitido que las familias eximan a sus hijos de cursar religión católica, a pesar de que muchas familias no tienen estas creencias. Hay que recordar que muchas familias se ven obligadas a escolarizar a sus hijos en estos centros concertados, por no lograr plaza en la pública o por adaptarse mejor sus horarios laborales a los servicios educativos y complementarios.
Europa Laica exige a las Administraciones Públicas que vigilen el cumplimiento de derechos fundamentales y libertades públicas amparadas por la Carta Magna y que son la base de un verdadero sistema democrático. Las Administraciones que “miran para otro lado” ante todos estos hechos son cómplices de actuaciones ilegales por parte de los centros educativos que cometen estos abusos.
Europa Laica demanda a los poderes públicos que utilicen todos los recursos a su alcance para garantizar el cumplimiento de estos derechos, como el envío de instrucciones a los centros educativos, la intervención de la inspección educativa y, en última instancia, de la Fiscalía.
Europa Laica está sugiriendo a las familias afectadas que primeramente recurran a la inspección educativa y, en su caso, interpongan las denuncias judiciales que consideren, y para las cuales esta asociación les ofrece su asesoramiento en todo momento, y que no cedan a ningún tipo de chantaje por parte de los centros educativos.
Sevilla Laica ofrece su asesoramiento y colaboración a todas las familias que lo requieran. Pueden escribirnos a través de nuestro email (derecha).